Compañía: Louise Bédard danse (lbdanse)
Duración: 61 min

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Documentos para consultar en sala

• DT/2659 Dossier [...]
• V2603 Grabació [...]

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Ficha técnica

Coreografía: Bédard, Louise
Intérprete: Bédard, Louise
Iluminación: Morgenthaler, Axel
Vestuario: Barsetti, Angelo
Dirección artística: Bédard, Louise
Asistente artístico: Chagnon, Ginelle
Música: Derome, Jean

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Más datos

"Detrás de cada solo de baile se esconde una mujer que nunca he conocido. Sólo por bailar hace un retrato, con cuidado surgen seguido por otro y otro, dando lugar a una multitud de caras. La creación de este solo es el resultado directo de mi necesidad para dar vida a estas voces susurrando en mi oído. bailo para revivir la memoria y mantener vivo el suyo Este solo ha estado dentro de mí durante mucho tiempo. Se une dos partes de mí, una que pertenece al pasado, otra para el futuro. Aunque el movimiento, que tratan de transmitir la esencia de esta mujer singular. "
Louise Bédard

Una vez, mientras que Louise Bédard estaba vagando, llegó por casualidad a través de una muñeca con un rostro sin edad y un cuerpo oculto bajo un vestido ondulante. Intrigado y adoptadas por esta mujer, figura, Louise Bédard se lanzó a la creación de foramen La femme en abril de 2001. Este nuevo trabajo, que se lleva a cabo por el coreógrafo, nos transporta a un mundo vigorosa, lujosa en la que los graves se encuentra con el cinturón de seguridad. Louise Bédard da vida a un personaje en el escenario de una belleza desconcertante que es a la vez trágico y jubiloso. Esta enigmática mujer-niña revela una esencia radiante en un espacio - inspirado en los elementos naturales de agua, aire, tierra y fuego - que es como un prisma de múltiples facetas. Ella es un personaje de la disposición inquieto, siempre atento a sus sentidos, cuyo cuerpo habla un lenguaje vanguardista: un volcán a punto de erupción.

Louise Bédard creado la obra mediante la yuxtaposición de un cuadrado, el paradigma geométrico en el que se desarrolló, en un círculo, la forma que se encuentra en su traje. Su porte y su paso son amplificadas por las muchas capas ocultar ella. En el transcurso de un viaje que marca las etapas de su evolución dramática, oval La femme gradualmente estos cobertizos en un acto de renuncia que es una verdadera metáfora de un rito de pasaje, que se la libera y le permitirá, por fin, a lograr la más pura forma de abandono.


Al igual que en sus obras anteriores, como Cocer Blanche (1990), Vierge Noire (1993), Cartes Postales de Chimère (1996) y el Elles dúo (2002), oval La femme presenta un retrato coreográfico de una mujer que da expresión a Louise Bédard de las preocupaciones sociales y personales.

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